La diferenciación de la diferencia

0 nos acompañaron

Varias veces intenté escribir este post, no me es sencillo, aquí va, que Luhmann desde el cielo nos ilumine.

Hacíamos referencia a Complejidad y Modernidad. De la unidad a la diferencia del mencionado autor en donde establece tres formas de diferenciación de la sociedad:

  1. La segmentación, que “diferencia la sociedad en subsistemas iguales. En las sociedades arcaicas estos principios son el «origen étnico» o la «residencia», o una combinación de ambos. La desigualdad resulta de una disparidad fortuita de condiciones del entorno.”
  2. La estratificación que “diferencia la sociedad en subsistemas desiguales. Alinea la asimetría sistema/entorno con la de igualdad/desigualdad. La igualdad deviene así una norma que regula la comunicación interna, mientras la desigualdad se convierte en una norma que gobierna la comunicación con el entorno.”
  3. La diferenciación funcional  que “organiza los procesos de comunicación en torno a funciones especiales, que han de ser abordadas a nivel de la sociedad. Puesto que todas las funciones necesarias tienen que ser realizadas y son interdependientes, la sociedad no puede conceder primacía absoluta a ninguna de ellas. Tiene que usar un segundo nivel de formación de los subsistemas para instituir una primacía de funciones específicas limitada a un conjunto especial de relaciones sistema/entorno.”

Si la primera diferenciación es una diferenciación fraternal en donde la diferencia de la sociedad se establece con un cortapizzas a partir de una equidad originaria, lo que constituye una diferenciación de la igualdad (equidad); la estratificación es otro tipo de diferencia, es la diferenciación de la diferencia.

 

La forma mas sencilla y simple de ejemplificar el primer caso de diferenciación es referenciarlo al sistema fraterno que existe en el seno familiar cuando somos chicos. Cada hermano es distinto del otro, sin embargo las reglas de la familia son que cada uno es tratado como igual en la diferencia, alguno será bueno en deportes, otro en el arte, otro en la docencia, etc., la tarea de padres y maestros será entonces potencializar esa diferencia para que podamos usarla como herramienta para la vida.

En esta primera instancia de lo social el mundo se nos presenta como infinito, con infinitas posibilidades y recursos, solo nos toca a nosotros organizarnos para que nuestras demandas sociales sean satisfechas.

Sin embargo aquí ocurrió algo más, debido a la especialización y /o oportunidad de los actores sociales, se entró en un proceso de estratificación social. ¿Que quiere decir esto? Que lo que antes se diferenciaba a partir de una igualdad de base (fraternal), ahora se diferenciará a partir de aquellas diferencias. De esta forma se cuantifica la calificación de la diferencia. Allí donde había altos y bajos, ahora habrá  más altos y  mas bajos, allí donde había jugadores de futbol ahora habrá los que la movían bien y los pataduras, allí donde había blancos y negros, ahora habrá amos y esclavos. Se había perdido el paraíso, “Entonces fueron abiertos los ojos de ambos, y se dieron cuenta de que estaban desnudos” (Gen 3:7). --Oí tu voz en el huerto y tuve miedo, porque estaba desnudo; por eso me escondí.

Decíamos: “Así se relata en el Génesis el primer pecado del hombre y la mujer, el pecado originario. El pecado original abre toda una nueva dimensión: establece el bien y el mal, devela los sexos, instaura el deseo y condena a ambos a esa condición para todo tiempo futuro.”

Pero Luhmann agrega algo más, y esto es lo sustancial en la diferenciación por estratificación:

“La igualdad deviene así una norma que regula la comunicación interna, mientras la desigualdad se convierte en una norma que gobierna la comunicación con el entorno.”

Entonces la diferencia no deviene de un proceso de diferenciación a la marchanta entre iguales como antes, así planteada la diferenciación de la diferencia produce un doble mecanismo, una igualdad estratificada para adentro y una comunicación diferenciada con el entorno. Si la matriz fraternal trataba con el entorno como una unidad en la diferencia, la sociedad estratificada se relaciona diferencialmente con el entorno y lo que regula esa relación es la comunicación tanto para dentro como para afuera.

Si la Fraternidad era:

“ la forma fractal emergente que surge a partir de que dos o más agentes logran un diseño de red tal que les facilite el acceso universal a los flujos materiales e informacionales que la atraviesan y sostienen, lo que le terminará confiriendo una identidad compleja, ya que en la búsqueda de ese diseño, los agentes ganan reconocimiento y confianza unos con otros”.

Al estratificarse una sociedad pierde su condición fraternal por dos flancos, el primero ellos porque la circulación de los flujos materiales  e informacionales internos no son eródicos, esto es no llegan a cada uno de sus componentes con igual probabilidad. (Esta es la característica mas común de la estratificación social, la división por clases). Pero Luhmann nos advierte no solo se produce este fenómeno de la distribución desigual hacia el interior de la sociedad sino que la mediación con el entorno, que es en definitiva la que satisfará las demandas sociales internas, estará mediada por una relación diferenciada esta vez con el entorno.

El típico caso para ejemplificar este fenómeno, a las sombra del bicentenario de la “independencia”, es la forma que tomaron las relaciones exteriores de la nueva nación Argentina una vez declarada la independencia. Si la instancia previa al 25 de mayo de 1810 era de una relación unitaria y monolítica con el entorno, mediada por el virrey, ahora sería oligárquica con centro en Buenos Aires. Unos pocos porteños serían la minoría encargada de relacionarse con el mundo, la aristocracia porteña. Esta estratificación, a la que se le dio batalla desde el interior por mas de sesenta años, se consolida con el retiro de Urquiza de Pavón. Desde entonces Dios ha estado en todas partes pero siempre ha vivido en Buenos Aires. Esta misma frase hecha es parte de una arquitectura hegemónica mediática que se ha venido practicando desde entonces.

¿Hay vida después de la diferenciación estratificación?

Tal vez esta ha sido la pregunta mas común que se ha hecho la política luego de la Revolución Francesa. Por lo que es para Luhmann no hay vuelta atrás, una vez estratificada una sociedad no tiene retroceso hacia una fraternidad dado que el nivel de complejidad que adquiere su estructura imposibilita que se desmonte este dispositivo, sin embargo también nos habla de la tercer forma de diferenciación propia de las sociedades más avanzadas ( para que no suene tan feo más complejas).

La ola neoliberal de los 80tas 90tas, redujo la bipolaridad del mundo a una hegemonía unilateral, como en Pavón, el comunismo resuelve no disputarle más el poder a los liberales de la forma en que lo venía haciendo, simplemente se retira de escena. Este hecho pone en carne viva las contradicciones del poder hegemónico entre “los de arriba” y “los de abajo”. Pero este tema abriría la discusión para otro post, volvamos al tema de la comunicación que propone Luhmann.

Venimos insistiendo con las posibilidades que da la comunicación  en un mundo donde es norma el dilema del prisionero, advertíamos sobre ese tema que la: realidad que descarna el hecho informacional del problema del prisionero. [es que] Si los prisioneros no manejan un mínimo de información común que les permita “saber” algo del otro y a partir de esa información ( a sabiendas) la resolución del dilema podría cambiar.

Si, como dice Luhmann: “la desigualdad se convierte en una norma que gobierna la comunicación con el entorno”, manipulando la comunicación con el entorno estoy estratificando a mi gusto a la sociedad. Para cambiar esta regla estratificadora es necesario hacer circular los flujos internos de información de una forma fraternal, garantizando así que no se monopolice su mediación con el entorno . Pero si esto es imposible debido al nivel de complejidad alcanzado por la sociedad, como se podría mitigar la diferenciación de las diferencias para volverlas a hacerlas mas igualitarias.

Solo vamos a dejar planteada la idea, ya que desarrollarla haría directamente insoportable este post. La pauta igualitarista devendrá del tercer tipo de diferenciación, la diferenciación funcional, la que posibilita que los de arriba estén junto con los de abajo hinchando por un mismo equipo en una cancha de futbol. En esos ámbitos las diferencias de clases, de estatus social, de educación, de dinero, etc tienden a borrarse. Es a partir de este tipo de diferenciación que se puede penetrar la estratificación, desarrollar un tipo de lenguaje y de comunicación que vehiculice este tipo de diferenciación podrá contribuir a que las diferencias sociales no sean tan distantes

Casaretto nos lee

2 nos acompañaron

Leemos:

Por último se refirió al siglo XIX como el siglo de la libertad, al XX como el de la igualdad y consideró que el siglo XXI debe ser el siglo de la fraternidad. “Esta es la tarea de los argentinos de los próximos años: tratarnos como hermanos. Estos hermanos más pobres son, ante todo, mis hermanos.”

Espero que sí Casaretto, pero te aclaro que no hay mas hermanos que otros, o se es hermano o no se es. Eso no se elige ( o sí) es una Fraternidad Laica

Waca Waca

1 nos acompañaron

LA DIFERENCIACIÓN DE LA SOCIEDAD

0 nos acompañaron

Así titula Niklas Luhmann uno de los ensayos que integran Complejidad y Modernidad. De la unidad a la diferencia. - Edición y traducción de Josetxo Berian y José María García Blanco, Editorial Trotta, S.A., 1998. El libro es del ´85 y es anterior a Sistemas Sociales; muchos de estos ensayos le sirvieron de andamiaje para esta última, su obra mas importante. Se puede bajar completo desde acá.

Traemos acá a “la diferencia” como rasgo diferenciador de lo político, entendido como la categoría que establece Chantal Mouffé y de la que nos ocupábamos en este post. Recordemos lo que decía Mouffé en En torno a lo político

“El pluralismo que planteo requiere discriminar entre demandas que deben ser aceptadas como parte del debate agonista, y aquellas que deben ser excluidas. Una sociedad no puede aceptar aquellas que cuestionan sus instituciones básicas como adversarios legítimos. El enfoque agonista no pretende abarcar todas las diferencias y superar todas las formas de exclusión. Pero las exclusiones son concebidas en términos políticos, no morales. Algunas demandas son excluidas, no porque se las declara ‘malignas’, sino porque desafían las instituciones constitutivas de la asociación política democrática…”

La sociedad tiene necesidades singulares y/o colectivas que resuelve demandando; es por eso que en el camino de su satisfacción encuentra diferencias que se zanjan interna o externamente. Si la pelea por satisfacer esas necesidades requiere de una lucha, de una agonismo de base, las diferencias en los métodos, deseos y fantasías que se establecen entre sus miembros singularmente ( y con el entorno a través de otro tipo de lucha); son complejas y deben ser estudiadas profundamente para poder “ver” la esencia de lo agonal. Discriminar entre diferencias es lo que que nos permitirá que lo agonista no se convierta en antagonismo.

Volviendo a Luhmann, él se ocupa de la diferencia ya que para este sociólogo:

“La teoría general de sistemas y la cibernética sustituyeron el modelo conceptual clásico de un todo constituido de partes y relaciones entre las partes por un modelo que enfatizó la diferencia entre sistemas y entornos.

…podemos concebir la diferenciación del sistema como una reproducción, dentro de un sistema, de la diferencia entre un sistema y su entorno. La diferenciación es así entendida como una forma reflexiva y recursiva de la construcción de sistemas. Repite el mismo mecanismo, usándolo para amplificar sus propios resultados. En los sistemas diferenciados encontramos dos clases de entorno: uno externo y común a todos los subsistemas y otro interno y separado para cada subsistema.[…] La diferenciación reproduce así el sistema en sí mismo, multiplicando las versiones especializadas de la identidad original del sistema mediante la división de éste en varios sistemas internos y en los entornos a ellos afiliados.”

Como se ve, si la diferenciación de las demandas produce y reproduce los agonismos, a partir de lo que nos dice Luhmann habría un continuo de lo agonal, que va desde lo simplemente agonista hasta lo antagónico, visto esto desde las categorías de Mouffe. Entender el proceso de diferenciación nos ayudará a “discriminar entre demandas que deben ser aceptadas como parte del debate agonista, y aquellas que deben ser excluidas”.

A este proceso Luhmann lo llama incremento de selectividad, es decir, como incremento de las posibilidades disponibles para la variación o la elección” y establece tres categorías de diferenciación la Segmentación, la Estratificación y la Diferenciación funcional.

Luhmann refuerza la idea de diferenciación al hacer un planteo histórico, en donde la diferencia aparece acompañada por rasgos cada vez más complejos “como un proceso de creciente diferenciación sistémica y de pluralización.” Dice:

La segmentación diferencia la sociedad en subsistemas iguales. La igualdad se refiere aquí a los principios de formación sistémica autoselectiva. En las sociedades arcaicas estos principios son el «origen étnico» o la «residencia», o una combinación de ambos. La desigualdad resulta de una disparidad fortuita de condiciones del entorno. La desigualdad, en este estadio, no tiene una función sistemática. No obstante, es decisiva para la diferenciación evolutiva de las sociedades.

La fraternidad pertenece a este estadío de la diferenciación, dado que mas allá de la equidad dentro de sus miembros existen divisiones de familia, lugar, raza, clanes etc., como lo veíamos en el capítulo La Matriz de El siglo de la Fraternidad. La segmentación entre el salvajismo, la familia cosanguinea, la familia panalúa y la sindiásmica está dado Según F Engels y L Morgan por un proceso de evolución, mas precisamente de selección natural, para evitar en incesto, en ninguno de estos casos se ve una desigualdad entre sus componentes a no ser la funcional en contra del incesto. Por lo tanto en los sistemas diferenciados por segmentación tendremos una topografía de red social mas distribuida que centralizada.

La estratificación diferencia la sociedad en subsistemas desiguales. Alinea la asimetría sistema/entorno con la de igualdad/desigualdad. La igualdad deviene así una norma que regula la comunicación interna, mientras la desigualdad se convierte en una norma que gobierna la comunicación con el entorno. El término griego isonomía se refiere a la igualdad de los ciudadanos localizados dentro de un estrato de la sociedad. Estos ciudadanos pretenden, con éxito, ser (o representar a) la totalidad de la sociedad. Pero la isonomía presupone la desigualdad con respecto a otros estratos de la sociedad. En otras palabras, la clase de ciudadanos define el entorno interno de su sociedad por medio de la «desigualdad». La ciudadanía depende de esta categoría para constituir su propia identidad y su autocomprensión.

Luhmman coincide con los planteos que hacía Juan Urrutia Elejalde sobre el tema de la comunicación. La estratificación, por supuesto, requiere una distribución desigual de poder y de riqueza —o, para decirlo de una forma más general, una distribución desigual de las posibilidades de comunicación—. Es interesantísimo esta afirmación, la mala circulación de los mensajes dentro del sistema hacen que con el tiempo haya desinformación de algunos sectores que a medida que esto ocurre se van marginando de la comunicación global, produciéndose estratificacionesen la circulación de los mensajes. Recordemos la condición ergódica necesaria para el establecimiento de la fraternidad, si los mensajes no van en todos las direcciones y no llegan con la misma probabilidad a cada uno de los miembros del sistema social, no tendremos un sistema fraternal, se producen bolsones de información compartimentada.

Pero lo interesante que plantea Luhmann es el mecanismo por el cual se produce este tipo de desigualdad por estratificación. En este post nos adentrábamos con el problema de la puerta que plantea Luhmann: “la desigualdad se convierte en una norma que gobierna la comunicación con el entorno”. La topografía de la red es la que establece los enlaces con el entorno, si esos enlaces son únicos o muy especializados, de tal manera que no haya otro enlace que pueda mediar con el exterior y reemplazarlo, se establecerá una primer jerarquía por estratificación que esta vez sí será sistémica.

Mouffé nos advierte sobre un mecanismo de moralización que acompaña este proceso de estratificación social. Luhmann refrenda a Mouffé en este punto y nos llama la atención sobre la imposibilidad de una vuelta atrás de este proceso:

“Por supuesto, siempre es posible moralizar acerca del problema de la distribución desigual. Pero en la actualidad no podemos avanzar desde una distribución desigual hacia otra igualitarista. El problema moral de la igualdad y de la desigualdad es un problema inherente a las sociedades estratificadas. Si bien ha sido articulado en términos de una teoría de la justicia, lo cierto es que no puede «resolverse » en tales términos.”

Como señalan los diagramas de de Paul Baran, según Luhmann no habría una real posibilidad de distribución en una topología de red mas descentralizada que distribuida. Ni tampoco una vuelta atrás en la reconfiguración de la misma.

Pero Luhmann establece una tercera forma de diferenciación social, mas moderna que las anteriores. Algo similar al planteo de Duncan Watts de partición jerárquica en función de la distancia social, distancia que poseía una miltidimensionalidad en función de alguna acción social en particular que se explica mediante un proceso de individuación, donde una agente en particular puede pertenecer a más de un sistema social. Juan Urrutia Elejalde llama a este camino A LA INDIIVIIDUACION POR LA PERTENENCIA. Luhmann lo denomina diferenciación funcional.

“La diferenciación funcional organiza los procesos de comunicación en torno a funciones especiales, que han de ser abordadas a nivel de la sociedad. Puesto que todas las funciones necesarias tienen que ser realizadas y son interdependientes, la sociedad no puede conceder primacía absoluta a ninguna de ellas. Tiene que usar un segundo nivel de formación de los subsistemas para instituir una primacía de funciones específicas limitada a un conjunto especial de relaciones sistema/entorno.

La diferenciación funcional transforma de nuevo la distribución de la igualdad y de la desigualdad. Las funciones tienen que ser desiguales, pero el acceso a las funciones debe ser igual, es decir, independiente de cualquier relación con otras funciones. Los subsistemas funcionales, en otras palabras, tienen que ser desiguales, pero sus entornos asociados tienen que ser tratados como entornos iguales, porque nada sino la función puede justificar la discriminación.

Una sociedad funcionalmente diferenciada, como resultado de esto, se convertirá, o pretenderá ser, una sociedad de iguales, en la medida en que es el conjunto agregado de entornos para sus subsistemas funcionales. Esto permite entender por qué la creciente diferenciación funcional —incluyendo la diferenciación de la economía, la educación y la ciencia— conduce a poner un renovado énfasis sobre el ideal normativo de «igualdad» en el siglo XVIII.” (Y podríamos agregarle el de la Fraternidad)

Para no hacer este post tan largo nos quedarían por revisar las críticas que hace Mouffé al los posmodernos dentro de este contexto, de todas formas las identidades modernas, al establecerse por este proceso de diferenciación, serán indefectiblemente mucho mas complejas.

Hipótesis de Mouffe Inversa

6 nos acompañaron

Hace unos días Artemio  desplegaba en este post, bajo el título todos unidos dificilmente triunfaremos... ,una especie de Hipótesis de Mouffe inversa que citaba:

“El peronismo anti K avanza en su plan de enfrentar unido a Kirchner Hay equipo. El peronismo disidente dio ayer la primera muestra pública de unidad. Y lo hizo a dos puntas.”

…la figura de Ricardo Alfonsín encabezando la fórmula pan radical (luego de su triunfo), agrega dificultades al Peronismo Federal. Descartada su participación en la interna justicialista para ganar y unificar bajo su conducción al resto del aparato, es muy improbable que esta facción populista conservadora pueda desplazar del lugar de alternativa electoral con más chances de suceder al actual oficialismo al pan radicalismo y el amplio sistema de alianzas que promueve Alfonsín.

A modo de comentario le recordábamos la Hipótesis de Mouffe sobre la posibilidad del triunfo de los populismos de derecha luego de un prolongado reinado de gobienos de coalición.

“La hipótesis de Mouffe es que si existe un gobierno de coalición por mucho tiempo, la alternativa ganadora subsiguiente es el populismo conservador de derecha. Ej, Italia, Bélgica y ahora nuestro hermanos Chilenos.
Lo que Ud plantea es la Hipótesis de Mouffe Inversa. Interesante, vengo pensando en esa posibilidad.
El planteo de Mouffe se basa en que en la alianzas se diluyen los agonismos y lo político. Por lo que si existe un agonismo a la Karta, la inversa ¿Sería posible?
A prima facie parece que sí, por lo que venimos diciendo sobre el sujeto opositor. Todo se diluye y se atomiza en la oposición. Por más que Ricardito active el avispero radical no le alcanza para enarbolar la celeste y blanca, más cuando la blanca y roja remite todavía y con mucha fuerza a la ALIANZA del 2001.

Planteada la HMI, hoy vuelve sobre el tema en base a  la carne podrida que tira el mil veces trucho periodista santafesino Darío Schueri . Schueri, un voraz que promete favores por derecha e izquierda y que maneja gran parte de la agenda política generada en Santa Fe  (Capital) y que es retrasmitida por la cadena de la corporación mediática provincial, busca sucesores para los dos grandes electores de la provincia el Lole y Binner.

Todo el mundo sabe , y Artemio también, que esto es una paparruchada, que está bien para la gilada radicada en el coto de caza de Schueri, pero que lo cierto es que ninguno de esos dos liderazgos son transmisible por carácter transitivo, tal vez se pueda dibujar un lindo cuentito, como el que relata el periodista, pero lo cierto es que la HMI toma una preponderancia decisiva en la cuotaparte que le corresponda a Santa Fe en la próximas Elecciones Nacionales del 2011.

Todo el mundo sabe también que solitos o acompañados los delfines no juntan un voto, que lo político NO pasa por allí, por donde Schueri pretende hacer pasar la política, la política santafesina, guste o no, hoy transita por la polarización nacional kirchnerismo-antikirchnerismo, por lo que inventar rejuntes y/o herencias hará cumplir la máxima de Artemio, todos unidos difícilmente triunfaremos…

A todo esto Agustín Rossi, como el Diegote, está tranquilo y espera, sabiendo que él es el único kirchnerista de la provincia, y si no es el único es el más visible. Lo que espera es un rival para poder salir a enfrentarlo, pero en tanto ese rival, o quien se precie como tal, no aparezca, solo le resta aguardarlo o “elegirlo”, y si está unido mucho mejor. Sabe que con el reutemismo no podrá contar por la simple razón que los reutemistas, (los votantes), odian al kirchnerismo, así que cualquier negocio político que hagan es solo un acuerdo de cúpulas.

Si la Hipótesis de Mouffé Inversa existe, esta será una buena oportunidad para comprobarlo. Mientras “la política” circula por donde Schueri quiere hacerla circular, “lo político” circula por la nacionalización de “la política”, esto es kirchnerismo contra el resto del mundo. En Santa Fe ha venido gobernando una coalición de partidos (provinciales) que no tenían referato a nivel nacional, esta vez la identidad fuerte la aporta el kirchnerismo que no se si le alcanzará para ganar, por lo pronto si logra nacionalizar las elecciones provinciales, y todo indica que sí, es muy probable que en Santa Fe también lo haga.

Es hora que los dirigentes del Frente Progresistas Cívico y Social evalúen que no son propietarios de sus votos, que un gran caudal de sus votantes también votó a Cristina (quién tb ganó) en el 2007. Si siguen paveando o escribiéndose el diario de Schueri, lo mas probable es que corran serios riesgos de perder.

¿Se caen los planes AUpH por el ausentismo y la deserción escolar?

8 nos acompañaron

Asignación universal

Diario “El Informe” de Venado Tuerto, jueves 3 de junio de 2010.

Además de preguntarle a Artemio por el tema, hice algunas averiguaciones en Venado, me dicen que hay serios problemas de implementación y que las familias no llegan a tiempo con la documentación a las escuelas, además de lo que dice la nota.

La solución que le encontró el Anses ( este es un dato de Rosario) es que por este año no van a ser tan estrictos con la documentación solicitada, no se si con el tema del ausentismo o deserción.

Es un tema para seguir.

Quién tenga data que la aoporte

La metáfora del tubo para la comunicación

2 nos acompañaron


Nuestra discusión nos lleva a concluir que, biológicamente, no hay ‘información transmitida’ en la comunicación. Hay comunicación cada vez que hay coordinación conductual en un dominio de acoplamiento estructural.
Esta conclusión es chocante sólo si nos empeñamos en no cuestionar la metáfora más corriente para la comunicación que se ha popularizado en los así llamados medios de comunicación. Según esta metáfora del tubo, comunicación es algo que se genera en un punto, se lleva por un conducto (o tubo), y se entrega al otro extremo receptor. Por lo tanto, hay un algo que se comunica, y lo comunicado es parte integral de aquello que se desplaza en el conducto. Así, estamos habituados a hablar de la ‘información’ contenida en una imagen, objeto, o más evidentemente, en la palabra impresa.
Según lo que hemos analizado, esta metáfora es fundamentalmente falsa, porque supone una unidad no determinada estructuralmente, donde las interacciones son instructivas, como si lo que pasa en un sistema en una interacción quedara determinado por el agente perturbante y no por su dinámica estructural. Sin embargo, es evidente, aun en la vida cotidiana misma, que la situación de comunicación no se da así: cada persona dice lo que lo que dice u oye lo que oye según su propia determinación estructural. Desde la perspectiva de un observador hay siempre ambigüedad en una interacción comunicativa. El fenómeno de comunicación no depende de lo que se entrega, sino que de lo que pasa con el que recibe. Y esto es un asunto muy distinto a ‘transmitir información’ “. (Humberto Maturana y Francisco Varela. El árbol del conocimiento. Santiago, Universitaria, 1994, p. 130).

Bloguero de oficio

6 nos acompañaron

(Versión original Miguel Ángel Morelli)

Mi oficio de bloguero es el oficio
De los que tienen espinas en el alma


Yo tengo mi taller en las entrañas
Y mi única herramienta es la telaraña.


Mi oficio de bloguero es el mas lindo
Yo puedo hacer jardín de los desiertos
Y puedo revivir algo ya muerto


Con solo postear una razón.

 

Posteo siempre a mi pueblo
Porque del pueblo es mi voz

Si pertenezco yo al pueblo
Tan sólo del pueblo será mi razón.


Nadie debe creer que el bloguero
Pertenece a un mundo extraño
Donde todo es escenario y fantasía


El bloguero es un ser más, que anda
Transitando las calles y los días
Sufriendo el sufrimiento de su pueblo
Y latiendo también con su alegría.


Mi oficio de bloguero es tan hermoso
Que puedo hacer amar a los que odian
Y puedo abrir las flores en otoño
Con solo encontrar una razón.

Pecados de sangre III

1 nos acompañaron

image

María Carolina Guallane, nacida Paula Cortassa Zapata, junto a su abuela.

Su historia la cuenta Cristina Rosolio. Yo me quedo con esta foto que parece una una escultura propia de Michelángelo, mírenla, publíquenla, piénsenla, llórenla, deténganse en la mirada compasiva de la abuela, acompañen a Carolina.

Una suerte de Inocencia del mal, el cierre de una historia dolorosa.

El único cierre posible.

Actualizado ( me colgué)

Viernes 4 a las 17:30 escuchen el reportaje a María Carolina Guallane en el programa de Abel Pistritto, en Radio LT 29 Venado Tuerto www.radiovenadotuerto.com.ar

Ok acá publico lo de Cristina por si no se lee en Faisbuk

María Carolina Guallane es portadora de una historia que puede parecerse a la de los hijos de Ernestina Herrera, si es que las pruebas de ADN resultan ser lo que todos imaginamos, pero que se desarrolló exactamente al revés. María Carolina vive en Venado Tuerto, y fue la primera hija de desaparecidos que encontró a sus familiares de sangre por decisión propia, luego de haber pasado toda su vida en otro hogar. ¿Qué la diferencia de los adoptados por Herrera?, que sus padres adoptivos, al ignorar la procedencia de su hija, la acompañaron fielmente hasta que encontró su verdadera identidad.
Su caso, investigado por la justicia de Santa Fe, se suma al de otros hijos de desaparecidos ya identificados, aunque el de Carolina es el más particular de todos. En su momento, un estudio de ADN hecho en tiempo y forma había determinado que Carolina en verdad había nacido con el nombre de Paula, y que era hija de Enrique Cortassa y Blanca Zapata. La historia había comenzado una noche de verano, el 11 de febrero de 1977, cuando ella tenía apenas un año y su mamá esperaba a su segundo hijo. Aquella maldita noche, un comando militar se metió por la fuerza en la casa que la familia tenía en Santa Fe y se llevó a todos a la rastra, en medio de gritos desesperados.
Desde ese día, de Enrique no se supo más nada. Tampoco se supo qué pasó con la criatura que estaba por nacer. Pero María Carolina fue entregada a la Casa Cuna, desnutrida y sin identidad.
La familia que adoptó a Carolina se enteró de que podía ser hija de desaparecidos gracias a la confidencia de algún piadoso empleado del juzgado. Jorge y María Guallane, los padres adoptivos, generosos y dignos, en vez de callar decidieron contarle todo a su hija del corazón cuando ella apenas si tenía doce años. A partir de ese momento, día a día la ayudaron a reconstruir su pasado. Con ese apoyo, y en compañía de las Abuelas de Plaza de Mayo, Carolina se presentó en el juzgado de Menores de Julio César Rogiano y comenzó a buscar a sus abuelos gracias a los datos que le aportaban algunos sobrevivientes de la dictadura y a los registros que se encontraron en el Ejército sobre la noche trágica en la que secuestraron a sus padres. La búsqueda dio resultado y Carolina, por aquel entonces, además de recuperar su identidad encontró a sus nuevos abuelos, Isabel Barreto y Delfina Cortassa.
-¡¿Por qué no me mira a la cara?! ¡¿Tiene miedo?! -le gritó con valentía Paula Cortassa -María Carolina Guallane- pero el cobarde militar bajó la mirada, buscó un punto fijo en el suelo y apuró el paso para escapar de la mirada de la jovencita.
Un rato antes de encontrarse con ella, el ex mayor Manuel Batto había sufrido un ataque de amnesia ante la fiscal Griselda Tessio que instruía en la causa, y había negado cualquier responsabilidad en la masacre de la calle Castelli al 4500, en donde un grupo de tareas de la dictadura secuestró a la familia Cortassa: Enrique sigue desaparecido, y Blanca, embarazada a término, apareció después con un tiro en la cabeza en el hospital Cullen, en donde sobrevivió doce días y después de dar a luz un varón que aún hoy María Carolina está buscando.
El viernes 28 de junio de 2000 María Carolina sepultó los restos de su madre, con estas palabras que escribió en su epitafio:
"La dictadura militar terminó con tu vida. Te persiguieron. Te alcanzaron. Te torturaron. Te mataron. Te enterraron como NN y te desaparecieron. Hoy sólo recupero tus restos, no te recuerdo pero te admiro y reivindico tu lucha. Tu hija Paula".
Paula Cortassa Zapata había sido secuestrada y mantenida más de dos meses en un Campo de Concentración en donde fue torturado a su padre por orden de los ex coroneles Juan Orlando Rolón y Domingo Manuel Marcellini. Repugna leer esto, pero la Unión de Promociones del ejército (http://www.energyworld.org/UP/) expresó su más profundo pesar el 5 de marzo de 2010, “con motivo del fallecimiento del Coronel Domingo Manuel Marcellini, preso político que también cumplía arresto domiciliario en la ciudad de Mendoza y quien se hallaba gravemente enfermo. El deceso del citado Oficial Superior, se suma a los ya más de 90 (noventa) Camaradas fallecidos en cautiverio, privados de sus legítimas garantías y derechos constitucionales. Acompañamos a todos sus familiares en este momento de dolor, elevando al Señor una oración en su memoria. “
Éste es el poder que hay detrás de Cecilia Pando. Aún así, la SUPRESIÓN DE IDENTIDAD NUNCA PRESCRIBE.
Imperioso ver la película “Botín de Guerra”, del director argentino David Blaunstein, film que hace pie en el nacimiento y crecimiento de la asociación Abuelas de Plaza de Mayo, junto al espantoso fenómeno socio-político que les dio razón de ser: la apropiación sistemática de los hijos de detenidos-desaparecidos por parte de la dictadura militar que secuestró, torturó y asesinó a los padres, y entregó a sus bebés en adopción a miembros y "amigos" del régimen.

Posts relacionados