Voy a tratar de hacer una pintura de los egos de los candidatos a gobernado de la Invencible Santa Fe. Para ir entrando en tema diremos que hay dos grandes frentes cada uno con cuatro precandidatos, uno peronista, y otro social demócrata, pero terciando entre ambos se articula la opción del Pro encabezada por el Midachi Miguel Torres del Sel quien no compite en estas interna y pasa derechito a las finales. A éste atenderemos primero.
El ego de La Tota se alinea con el del artista, su necesidad por reconocimiento es permanente y efímera, demanda de reafirmación de sí, la mayoría de su tiempo lo dedica a eso, a que su público lo vive. Y por cierto es muy eficaz en su metier, su llegada a la gente es inmediata, solo le basta con agarrar un micrófono en algún Karaoque local para manejar un público fanatizado, el timbreo, la caminata por las calles conmueve multitudes de celulares con cámara que se empecinan de capturar ese ego para la eternidad. El ego del artista de esta forma se trasvasa, via celular, al fan y este último tiene sus 20 segundos de fama junto a “un famoso” con el que podrá chapear frente a sus amigos por un período igual de efímero que el paso del Midachi por su ciudad. Como los hidratos de carbono de digestión rápida, los aplausos de los actores se evaporan en un abrir y cerrar de ojos. La experiencia política es algo con la que muchos sueñan pero, del caso de resultar ganador, como Palito Ortega, o no, como Rubén Blades, sus egos se negarán a pertenecer a otros, tarde o temprano terminarán abandonando. Ni Nancy Duplaa se banca el acoso de sus fans.
Ya dentro del peronismo y siguiendo la línea del artista que aterrizó en política, nos encontramos con el bueno de Rafael Bielsa, poeta e intelectual de café. Estos egos, si bien necesitan de mucho afecto de su público, no están agraciados de la simpatía que ostentan los primeros. El mundo del intelectual es demasiado chico para que convivan muchos más dentro de el, además de egocéntrico, es individualista. Por eso le da lo mismo estar cerca del Proceso como de los Kirchners, lo importante es que se lo escuche, cuando habla, este tipo de ego se escucha a si mismo, los otros deben llevar los aplausos grabados, total no importan; como los programas cómicos con los reidores que garantizan la risa este tipo de ego lleva incorporada la autosatisfacción, en criollo “la paja”. Por eso poco importa quien está enfrente, lo importante es que hay otro que le haga de medio para la autosatisfacción.
Sin duda un ego ahora difícil de tragar es el del Juan Carlos Mercier, el ex ministro de Economía de Carlos Alberto Reutemann. Estos egos son totalmente funcionales a un proyecto mayor, el engranaje visible de alguna sociedad secreta que tiene perfectamente definido hacia dónde va y qué quiere. Es el ego del empleado del mes, el de los Domingos Cavallo, funcionales y besa sables de algún oscuro poder que les rascan la cabeza y les dan una galletita para que muevan la cola. Estos egos son temerarios y perversos, capaces de hacer cualquier cosa en pos de su satisfacción. Por suerte el gerentismo ha pasado de moda en nuestro país, a estos personajes solo los apoya alguna minoría nostálgica de los noventas.
El ego de Perotti tiene las características del desarrollista, parecido al gerente merciernario del caso anterior. Estos egos son ejecutores, prolijos y determinados. Son cautelosos y saben negociar posiciones. La mayoría de las veces se les parecen a los anteriores en que también son egos serviles y dependen de corporaciones, pero a diferencia de éstos no son temerarios. Su fuerte es la obra, lo útil, saben hacer; por eso le son útiles a contadores y abogados. Son la mejor imagen que pueden presentar las corporaciones. Estos egos se asientan sobre la eficiencia y la prolijidad.
El ego del chivo Rossi también es del servil, no un servil arrastrado sino del servil que quiere pero no puede. Es el ego del hijo que no puede llegar matar al padre, lo desafía permanentemente pero no llega a superarlo. Es un ego resentido que no puede esperar y la impaciencia lo hace cometer errores, incluso pierde la confianza del padre en el intento. Es un ego orgulloso y obsesionado con ser, en ese intento se le va la vida, el típico ego que no está conforme, que se cree con los derechos del leal pero que aspira a la sustitución. En esta trampa radica su contradicción, quiere ser pero no sabe bien para qué
Ya en el FPCS nos encontramos con Antonio Bonfatti. Su ego también es el del hijo, el del segundón, pero a diferencia del hijo que representa Rossi este es un hijo es un hijo dócil que quiso pero no pudo matar al padre entonces se resignó a esperar su muerte natural. Su proceso de maduración no terminó, ni madurará hasta que muera el padre y herede. Es el mas siervo de la cusa del padre, el Hijo pródigo que alguna vez retó al padre pero que terminó desistiendo en sustituirlo, de matarlo, el ego del Príncipe Carlos de Inglaterra. Por lo que su sitial en la cosmogonía familiar es la del que espera, paciente y fielmente espera la muerte, la herencia, fortuna que como nunca le fue propia no la sabrá manejar y lo más probable es que la dilapide. De todas formas a la gente no le gustan los egos segundones, no les gustan los hijos, prefieren los padres ese será el primer problema con estos egos.
La contrafigura a Perotti dentro del FPCS es Mario Barletta, si bien prolijos y ejecutores los dos, la genética de este último se recuesta mas hacia lo académico que hacia lo desarrollista, lo que lo saca del medio de la empresa y lo sitúa dentro del mundo de los claustros mucho mas abstracto. Su dependencia en este caso es mas hacia la institución y los pilares de la república que hacia el de las corporaciones típica dentro del desarrollismo. Su visión del mundo no es la de la obra sino de la norma jurídica y allí radica su problema, es leguleyo. La calle no es su medio y necesita de virtualizar esos lugares para poder transitarlos. Lamentablemente a este candidato le hace falta el radicalismo que ha abandonado estas bandera y se ha drenado hacia la tranza y la vil rosca. La soledad rodea a estos egos, su reino es demasiado pequeño para gobernar una provincia, la nostalgia del pasado no alcanza para contener.
Y si de radicales se habla le toca el turno al histórico Changui Cáceres. Este ego no solo se quedó sin partido, se quedó sin provincia, sin país, se quedó solo. Este ego es del tipo narcicista. Supo decir que se retiraba de la política porque la gente se equivocaba al votar, por eso no lo votaba, y que la gente no lo merecía. Pese a esto hora vuelve, se siente, como Mercier, capaz de capturar un electorado que le es adicto, un numen suficiente como para hacer mas daño que dar satisfacción, por lo que estos egos son también perversos, gozan con el sufrimiento del otro, y como perversos nunca se satisfacen al provocarles ese sufrimiento. A estos egos los castiga la imagen negativa. El olfato popular en refleja el rechazo a estos egos en lo que se da por llamar “imagen negativa”, no obstante esto, sabiendo que sus posibilidades de crecer o eventualmente ganar le están coartadas insisten en ser.
Finalmente llegamos a pechito Giustiniani, el niño aplicado y bueno, el se gana las minas sin trabajo, de atrás, el ego hábil al que no le cuestan las cosas, el que solo tiene que ser, el que no tiene que hacer nada parque la naturaleza lo favoreció con dones no muy comunes. Este ego no es segundón, simplemente reclama lo que cree le corresponde, esta acostumbrado a ganar, alguna soberbia no le permite admitir resignarse a segundos lugares o a esperar. Podrían llegar a tener la habilidad de Maradona pero son los Messí. Uno nunca sabe realmente si son buenos o si todo Barcelona juega para ellos. Por eso la duda que a uno le queda con todos ellos es que si sirven mas allá que para ganar.
De todos los egos el ego que me resulta mas útil es el de Pechito, los otros dos con posibilidades son Bonfatti y Rossi, dos segundones que abrirles la puerta significa la incertidumbre del reo que recién sale en libertad, sus posibilidades están acotadas entre la dilapidación y el exabrupto. Estos egos no dan con el perfil de la provincia que se inclina más hacia los Perottis y los Barlettas, buenos candidatos, pero el primero deberá esperar hasta la próxima y el segundo necesitará de rearmar su partido si algo en serio pretende. Lo que nos vuelve a dejar frente a Pechito, este Julian Weich de la política que seguramente toda madre santafesina querrica como partido para su hija.
Se verá
PD: el candidato fantasma Hermes juega un rol al todo o nada en ésta, no solo cohersionando a todos los que cree que sacan los pies fuera del plato, sino extorsionando a todos los que simpatizamos con este gobierno y lo tenemos a él como un posible candidato a presidente de la nación. El chantaje consiste en presionar por su candidato amenazando con renunciar a llevar este proyecto hacia otras geografías. Chantaje que por un lado no se va a llevar a la práctica, si él quiere ser va a encontrar las excusas o los clamores para ser, por el otro su ego no le deja ver que Hermes no es candidato de él mismo sino de todo un sector que pone en él el rol de liderar este espacio pero de ninguna manera lo hegemoniza. O Hermes o nada. Luego de Hermes la nada. Lindo panorama pos internas, lindo futuro para el FPCS. ¿Acaso esto nos esté advirtiendo sobre las posibilidades ciertas de un candidato que todo lo quiere controlar? Que le fue fácil en Rosario, que no le fue tan dificil en la provincia porque en el estado se quedó con toda la estructura burocrática y política del peronismo, pero que definitivamente no le alcanza para manejar una nación, no porque no tenga desarrollo territorial, en eso lo podemos ayudar, sino porque el estado nacional no se gobierna a control remoto, son muchos los intereses en puga, tantos que un grupito no los puede abarcar. Tal vez Hermes sepa de esto por eso se encapriche y rompa todo aún antes de probar, si es así sería otro que se baja antes de correr, alguien que nos deja huérfanos, ego parecido al de los artistas, porque ahora Hermes debería pertenecer a su pueblo, sin embargo pertenece a su partido, o sea a él mismo. Malo malo esto.
Creo que a diferencia de lo que se podría pensar, en estas internas se juega “lo político” desde el concepto de Mouffe, La política quedará para la próxima, y ésta dependerá de estos egos, de todos los egos, el ego que resulte ganador.
PD2: El voto en blanco debe ser explicitado como tal, no marcar ninguna casilla significa el voto Nulo. A tal efecto se habilitó una casilla (ver modelo ) al final de la lista. Si se observa el último candidato el de Unidad Obrera, se llama Blanco y está inmediatamente encima de la casilla del voto en blanco. Una cosa es votar en blanco otra muy distinta es votal a Blanco
1 nos acompañaron:
Hay Charly.
Haceme reir que me gusta...tiene razón Enrica, sos una bosta (q afeminado).Cada dos años das catedra, alta producción cultural bajando a tierra los fetiches políticos; este post hay q cobrarlo! Querido lector: haga su aporte, café $6, con mluna 10.
SOLDEMAYO.
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