Hace ya varios días que se ha instalado la tesis de que el progresismo blanco no sirve para un carajo. Ya que dicha tesis está soportada por varios blogueros como Lucas Carrasco, el mismo Pablo de Artepolítica así como muchos otros como Balvanera, MEC, El escriba, etc. y del otro lado no se escuchan muchas voces voy a intentar una tibia defensa, típica de nosotros los progresistas blancos.
Para situarnos en el debate he de hacer notar que la mayoría de las críticas que se escuchan provienen de sectores kirchneristas, o sea del progresismo que quiere ser negro. Como tal lo veo mas como un fenómeno metropolitano. No escucho a ningún moronés tomar partido, tanto sea en contra o a favor de Sabatella. Silencio de radio.
Hoy posteamos por acá
6 nos acompañaron:
Buenos Aires, abril-junio de 1972
Trácense las líneas generales como una narración de Borges.
El dictador es derrocado y más de la mitad del pueblo se alegra d,e ello. El dictador había llenado las cárceles y vaciado la tesorería. Al igual que muchos dictadores, no había empezado mal. Quería engrandecer su país. Pero él no era un gran hombre; y quizás no era posible engrandecer el país. Transcurren diecisiete años. El país sigue sin grandes hombres; la tesorería sigue vacía; y el pueblo se encuentra al borde de la desesperación. Empieza a recordar que el dictador tenía una visión de la grandeza del país y que era un hombre fuerte; empieza a recordar que había dado mucho a los pobres. El dictador está en el exilio. Comienza la agitación popular para que vuelva. Ahora el dictador es muy viejo. Pero el pueblo recuerda también a la esposa del dictador. Ella amaba a los pobres y odiaba a los ricos, y era joven y hermosa. Y ha seguido siéndolo, porque murió joven, en plena dictadura. Y, milagrosamente, su cuerpo no se ha descompuesto. ~
“Esa",. dijo Borges, «es una historia que yo nunca podría escribir».
porque los moronenses todavía no han decidido para qué lado va la volterata aún. Dicho tibiamente. Je.
Lucas buen regreso, no lo hacía muerto, lo hacía de parranda
es un intenso intento por pertenecer a una tribuna popular que, la verdad,
los mira como a bichos raros.
La Presidenta, cada vez más alejada de progresistas blancos y de neoliberales, nos sorprende con medidas de fuerte tono nacional y popular. Para los mediocres agoreros de malas nuevas como Duhalde, Melconian, Joaquín Morales Solá, Carrió, Gerardo Morales y tantos otros, quienes pronosticaban la debilidad del modelo político, económico y social propugnado por Cristina Fernández y Néstor Kirchner, hoy nos han sorprendidos por la decisión de nuestra presidenta, Cristina Fernández, de liquidar de un plumazo la deuda ya casi crónica con el Club de París.
¿sos vos Luis? No jodas, si por habernos encontrado con el viejo demodé de Jorge Schussheim hicimos una joda que duró trs días y que trataron tres blogs.
Si son vos no te imaginas la fiesta que hacemos.
Es más me dedico a forrear a todo Artepolitica
Publicar un comentario