Más allá de la Ley de Medios Audiovisuales

Hay algo que caracteriza a las políticas K y esto es correr los límites. Esto de por sí no tiene mucho significado social si una vez abierto los espacios (políticos) nadie los ocupa.

La ley de medios no es mucho mas que esto: abrir los espacios del espectro radiofónicos y de TV para que alguien los ocupe. La ley no dice nada de estos alguien, simplemente asigna cupos de radiodifusores y de algunos contenidos mínimos, pero no dice, como es obvio, quienes deben llenar esos cupos.

Una vez aprobada la ley, y todo parecería que así ocurrirá, los hasta ahora privados de la palabra y de la imagen podrán reclamar para sí dichos espacios, por eso se hace imprescindible diseñar contenidos y formatos mínimos para llenar esos nuevos espacio. Lo peor que nos podría pasar es que un nieto de Neustad de acá a diez años nos induzca volver a los actuales formatos porque el estado, las cooperativas, las Madres de Plaza de Mayo, no han sabido aprovechar la oportunidad que hoy se nos abre.

Por eso, para que esto no ocurra, sería bueno empezar a tirar ideas. Aquí van algunas

Ámbito de la cultura

1. La cultura hasta ahora ha venido siendo mediada por empresas discográficas y/o editoras. Siempre es bueno recordar este viejo post de la Fundación Vía Libre ¿Para qué sirven las discográficas y las gestoras colectivas?. Los nuevos formatos tecnológicos abren un impresionante abanico de nuevas posibilidades, incluso posibilitan nuevos negocios.
2. La participación popular tanto en la creación, difusión, como de en el consumo de Bienes Culturales, está íntimamente relacionada al proceso de descentralización de su correspondiente: producción, difusión y comercialización de dicha industria. Así poder contar con un amplio abanico de posibilidades a partir de la nueva ley posibilitará una gran desconcentración y territorialización de la industria cultural como el Tecnobrea brasilero citado por Fede en el post de la Fundación Vía Libre.
3. En mi experiencia personal, si los libros que he publicado: este con 34 downloads desde agosto de este año y este otro con mas de 70 descargas desde agosto del año  pasado (se borró el contador), hubiesen tenido que competir con los 1650 libros que se publican mes a mes en la Argentina, hubiese estado muerto y desepcionado. Las nuevas formas tecnológicas y una apoyatura de difusión a través de la brecha que se abre con la Ley de Medios abren, también para el formato escrito todo un abanico de posibilidades.
4. La digilitalización de la TV agregará un plus a los formatos visuales, muchos de los contenidos producidos desde casa se podrían subir directamente al formato televisivo. O por el contrario, como hace actualmente Canal 7 y Encuentro, los formatos televisivos una vez difundidos, están disponible para ser reproducidos vía internet, como este capítulo del ciclo de José Pablo Feinman: Filosofía Aquí y Ahora donde trata sobre la Dialéctica del Amo y el esclavo de Hegel, que usara Goliardo y tb yo para este post.
5. Lo que pasa es que sin un marco jurídico para todos estos tomas y daca que la Web 2.0 posibilita, corremos el riesgo de ser apretados y o censurados por los broadcasters. Porque, un poco por el derecho de autor y otro poco por ser los dueños del caballo del comisario, la concentración afecta doblemente, uno por el derecho de autor y el otro por el por la concentración y  el ejercito de locutores y periodistas disciplinados.
6. La desmonopolización de la transmisión del futbol se lleva todo un apartado por si sola, recordemos que este deporte es la punta del cabo para convocar a  al pueblo hacia otros espacios.

Ámbito de la Política

1. La oferta se abrirá en tres espacios, uno estatal, no comercial pero monopólico; otro comercial, con fuertes posibilidades de concentración y un tercer sector, no comercial que lo constituyen las ONGs, las cooperativa y las organizaciones de la sociedad civil que en algunas localidades podrían convertirse en monopolios. En base a esto, la oferta que se abre varía de lo comercial a lo netamente popular, de lo estatal a lo netamente privado, lo que nuevamente de por sí no es ni bueno ni malo, solo la forma en que se distribuya y se ocupe esa oferta resolverá el actual statu quo para un lado o para el otro.
2. De todas formas y pese a lo dicho en el punto 1  la oferta de por sí es mas generosa que ahora, y esto tiene que ver con las posibilidades que tiene la cultura local, nacional y/o latinoamericana para ocupar los espacios abiertos por la Ley. Por lo que la sociedad civil, la política, los realizadores de la cultura deberán abocarse a producir contenidos para llenar esos espacios. Esto es muy bueno ya que toda una nueva camada de actores (políticos, sociales, culturales) podrán tener un lugar donde expresarse que antes les estaba vedado salvo que pagaren un canon y a veces ni aún así.
3. Si la actual concentración de medios ha provocado miedo, pánico y otros trastornos de  psicosociales, y como se ha probado, todo el bombardeo de los noticieros ha contribuido a la desarticulación del tejido social, los nuevos contenido deberían propender a relinkiar el tejido social, como solicita mi amigo Marcelo Estraviz en este magnífico post  A linkania e o Religare, debería ser recompuesto a partir de la creación de sociedad.
4. Por lo dicho en el punto anterior la creación de capital social  se hace imprescindible a partir de una política de estado sobre los contenidos que habrán de circular por el nuevo espectro. Empowerment, mal traducido como apoderamiento o empoderamiento, significa la transferencia de poder real a un sociedad, a un pueblo. Los nuevos contenidos deberían estar apuntados en esa dirección.
5. Cito un pasaje de De revolutionibus orbium argentum para terminar

   Paulo Freire[iv] se refiere a una verdadera “cultura del silencio” que nos dejó como herencia la conquista de los pueblos latinoamericanos. Cree que la génesis de esa cultura del silencio se encuentra en la colonización de Latinoamérica, o que el sincretismo de las culturas dio como resultado ese silencio:

   “Así vivíamos todo nuestro período de la vida colonial. Presionados siempre. Casi siempre imposibilitados de hablar. La única voz que se podía oír era la del púlpito (…) el gran servicio que prestan ‘las iglesias’ al poder establecido, cuando hablan de tantos pecados, de amenazas de fuego eterno, de perdición sin rescate.” [v]

   Freire[vi] se “identifica y anima los movimientos de la comunicación para el desarrollo como el empleo de medios como la radio en zonas de difícil escolarización, etc. Para Freire, los medios son un instrumento cultural de primera magnitud para romper el retardo de amplias capas sociales, para devolver la palabra al que no la posee, que es la negación del derecho de expresión y el origen de la cultura del silencio. La existencia del ser humano sólo se da en el diálogo, en la comunicación”.